Tras la irrupción de Apple y Disney, la carrera por ser la principal fuente de entretenimiento se hace cada vez más competida. Pero la atención se dirige inevitablemente hacia Netflix, el pionero en la distribución de contenido digital. Los cerca de 150 millones de abonados que tiene la plataforma de streaming le generaron unos ingresos de 4.520 millones de dólares en el primer trimestre del año, un 22% más que en el mismo periodo de 2018. El beneficio creció a un ritmo exactamente igual, hasta alcanzar los 344 millones.