La crítica situación de contingencia ambiental que ha vivido la Ciudad de Méxicoen la última semana ha afectado a millones de habitantes de la capital y de los suburbios, pero también ha impactado a los animales que viven en la zona.
Es por ello que los tres zoológicos de la Ciudad de México –el de Aragón, el de Chapultepec y el de Coyoacán– cerraron sus puertas al público desde este jueves 16 de mayo, para impedir que realicen actividades al aire libre, una de las recomendaciones de las autoridades ante la situación de emergencia.
Incluso el zoológico de “Los Coyotes”, ubicado en la alcaldía de Coyoacán, en el sur de la ciudad, cerró sus instalaciones desde el 15 de mayo. Para informar a la ciudadanía sobre estos cierres se colocaron avisos en las entradas de los respectivos parques.
La Ciudad de México se encuentra en un momento delicado: desde el sábado, la capital se cubrió de mucho humo y contaminación, en parte debido a los varios incendios que ocurrieron en fin de semana, e incluso algunos que todavía no pueden sofocarse, lo que hizo imposible el desarrollo de actividades al aire libre.
El martes pasado, la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) declaró la Contingencia Ambiental Atmosférica Extraordinaria debido a las altas concentraciones de partículas PM2.5 y ozono y desde entonces no han dejado de estar activa.
Este jueves y viernes, tanto la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) como el Instituto Politécnico Nacional (IPN), las dos universidades públicas más grandes del país, decidieron suspender labores también jueves y viernes.
La Secretaría del medio ambiente (Sedema), a través de la Dirección general de zoológicos y conservación de la fauna silvestre, informó también sobre las medidas que aplicará para proteger a los ejemplares que habitan los zoológicos de la capital durante este fin de semana.
“Con la finalidad de mantener la salud de los huéspedes que se alojan en las instalaciones de los tres zoológicos, se determinó que permanezcan resguardados en sus casas de descanso y sólo se permite la salida para actividades de mantenimiento y limpieza”, señalaron.
“Todas las especies son vigiladas de manera permanente por sus cuidadores y médicos veterinarios. Los albergues de ejemplares de gran tamaño que requieren mantenerse en movimiento constante cuentan con accesos entre sus casas de descanso y sus recintos abiertos, esto les permite salir y entrar cuando lo necesiten”, agregaron.